QUÉ ES LA MIOPÍA?
Es un trastorno visual común en el cual las personas pueden ver claramente los objetos cercanos, pero tienen dificultades para enfocar los objetos distantes. También se conoce como «visión corta». La miopía ocurre cuando la forma del ojo o la curvatura de la córnea impide que la luz se enfoque adecuadamente en la retina, lo que lleva a una imagen borrosa para los objetos lejanos.
Cuáles son las causas por la que se produce la miopía?
La miopía puede ser causada por varios factores, incluyendo la genética, el entorno y los hábitos de visión. En muchos casos, la miopía tiende a desarrollarse durante la infancia y empeorar en la adolescencia. Algunos estudios sugieren que el tiempo excesivo pasado en actividades de cerca, como leer o mirar pantallas, también puede contribuir al desarrollo de la miopía.
Cuáles son los síntomas de la miopía?
Los síntomas de la miopía incluyen:
- Visión borrosa o poco clara de objetos distantes,
- Dificultad para ver pizarrones o letreros en la distancia,
- Entrecerrar los ojos o fruncir el ceño para ver con claridad,
- Fatiga ocular
- Dolores de cabeza frecuentes después de actividades visuales prolongadas.
Cuál es su tratamiento?
La miopía puede implicar, el uso de gafas, lentes de contacto o cirugía refractiva.
- Las gafas y los lentes de contacto corrigen la refracción del ojo, permitiendo que la luz se enfoque correctamente en la retina.
- La cirugía refractiva como la cirugía LASIK, remodela la forma de la córnea para mejorar la visión.
Cómo prevenir la miopía?
Para prevenir o retrasar la progresión de la miopía, se recomienda seguir algunas medidas:
- Realizar pausas regulares durante actividades visuales prolongadas, como leer o usar dispositivos electrónicos.
- Mantener una distancia adecuada entre los ojos y los objetos mientras se lee o se realiza trabajo de cerca.
- Pasar tiempo al aire libre, ya que se ha demostrado que la exposición a la luz natural puede tener un efecto protector contra la miopía.
- Mantener una buena postura y posición de lectura.
- Realizar exámenes oculares regulares para detectar cualquier cambio en la visión y ajustar la prescripción de los anteojos si es necesario.
Es importante recordar que estos consejos pueden ayudar a controlar la progresión de la miopía, pero no pueden prevenirla por completo. Si experimentas síntomas de miopía o cualquier otro problema visual, es recomendable que consultes a un profesional de la salud visual para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.
